Rondas de financiación de una startup ¿Buscas financiación?

Poner en marcha un proyecto siempre requiere de un gran esfuerzo por parte de los miembros fundadores. La inversión a nivel económico y de tiempo suele ser muy elevada, no obstante, existen elementos que pueden ayudar a facilitar el proceso, como la ronda de financiación de una startup.

Especialmente en nuestro país, es importante tenerla en cuenta, pues contamos con ejemplos como Cataluña donde se ha puesto de manifiesto el crecimiento de este tipo inversiones siendo la cuarta zona de la Unión Europea con más rondas de financiación. Desde Bastida&Farina queremos contaros qué son las rondas de financiación para una startup y en que consisten.  

¿Qué es una ronda de financiación de startup?

Las rondas de financiación de startups son procesos que consisten en que nuevos socios adquieran una parte del capital social de la empresa a través del desembolso de medios económicos que den liquidez a la startup. Es decir, en estas rondas los inversores aportan capital económico para impulsar el crecimiento de la empresa a cambio de obtener parte del control de la misma. 

Uno de los beneficios de financiarse de esta manera es que no es necesario acudir a los medios bancarios tradicionales, sino que puedes hacerlo a través de inversores que estén más especializados en el sector de la startup. Estos, en la mayoría de ocasiones, están más dispuestos a arriesgar si ven futuro en el proyecto de lo que lo estarían los métodos tradicionales.

Ronda de financiación de una startup: Características y tipos

Existen varios tipos de rondas de financiación de startup que varían en función del objetivo que se persiga en ese momento y de la etapa de desarrollo en la que se encuentre la startup. Entre las diferentes rondas de financiación encontraremos:

• La ronda Pre-seed y seed
• Ronda de financiación serie A
• La ronda serie B
• Ronda de financiación serie C

Ronda de financiación de una startup, ronda pre-seed y seed

Esta ronda de financiación de startup es la inicial, conociéndose incluso como ronda previa. Se busca financiación para asentar las bases del futuro proyecto y de la estructura empresarial que tendrá la startup.

El objetivo final es alcanzar un Producto Mínimo Viable con el que poder financiarse de forma autónoma. Al ser la más temprana de todas las financiaciones, suele tener como foco el obtener capital de la gente próxima a la empresa (como familia o amigos) además de aportar el fundador sus propios ahorros.

Para lograr un mayor desarrollo, también es posible contar con otros métodos como las incubadoras de startups y las aceleradoras de startups. Estas no solo aportarán conocimientos útiles para el proyecto, sino que además pondrán en contacto a la startup con inversores del sector. 

Una vez se alcance el Producto Mínimo Viable para operar en el mercado, se pasará a buscar financiación de otras fuentes como los business angels o Venture Capital.

En muchos casos, además de capital, estos se implicarán en el proyecto y también aportarán asesoramiento. Es importante llegar a este punto porque este tipo de financiación se dará cuando ya se haya probado la viabilidad y el valor del proyecto en el mercado, aunque sea mínimamente. 

Ronda serie A

Esta ronda de financiación de startup está orientada principalmente al crecimiento de la empresa. Llegados a este punto, el proyecto ya está bien definido y la estructura de la empresa está consolidada, por lo que la gerencia de la startup ya sabe dónde va a invertir el capital que consigan.

La idea es que el crecimiento de la startup se produzca lo más rápidamente posible gracias a ese aporte extra de inversión. Un buen ejemplo de cómo utilizar esta inversión durante esta fase y aumentar el crecimiento será usar ese capital para la contratación de más personal. 

Por su parte, los inversores que participan en esta ronda apuestan por la startup con el objetivo de vender las participaciones que han adquirido en un futuro y rentabilizar su inversión. Las cantidades que se suelen captar en esta fase están en torno a los 500.000 € y los 5 millones dependiendo de las proyecciones del negocio.

Ronda de financiación serie B

En esta ronda de financiación de una startup se busca la expansión del negocio. Es probable que las valoraciones que haya conseguido la startup sean mejores debido a su trayectoria, lo que facilitará encontrar inversores.

Por otro lado, esto conseguirá que la inversión tenga un riesgo menor y, por tanto, que el costo de la inversión sea mayor. Se espera que, en esta etapa, la empresa logre aumentar sus ingresos, su clientela y que se vislumbre el éxito del proyecto. 

Ronda de financiación C

En este punto podríamos encuadrar toda ronda de financiación de una startup cuando ya está plenamente asentada en el mercado y funciona como una empresa más. Los objetivos de buscar financiación en este punto variarán mucho entre las diferentes empresas. Algunas buscarán expandirse a otros territorios y otra a nuevos nichos de mercado. 

En esta ronda suelen estar como principales inversores los fondos de inversión de capital de riesgo o entidades financieras de inversión. En este sentido, dichas entidades estudiarán bien las proyecciones de crecimiento y aportarán capital en función de cuál esperan que será el retorno de inversión.

Siguientes pasos tras una ronda de financiación 

Aunque cada ronda de financiación y proyecto tiene sus propios objetivos, en la gran mayoría cualquier ronda suele estar enfocada en un objetivo: hacer crecer la empresa. Debido a ello, tras haber trabajado y analizado a más de 150 startups, hemos desarrollado los 3 pilares de los que suele depender este crecimiento. Los hemos condensado y resumido en este vídeo, por lo que si quieres tomar un camino ya probado con el que usar esta financiación para conseguir los verdaderos predictores de éxito, te recomendamos mirarlo.